La vida con Jesús es un regalo del cielo. Creo que todos estaremos de acuerdo con eso. Cada uno de nosotros ha descubierto que dentro de nuestra pequeñez, Dios ha querido mirarnos con amor y hacer de nosotros mejores persones, padres, hermanos, hijos, esposos, etc. No es un camino fácil, el de decidir por Él, pero una vez la decisión está tomada, Él nos entrega las herramientas necesarias para vencer nuestras debilidades, para caminar más erguidos, para poder ir mirando siempre al frente y avanzar sin temor. Dificultades siempre habrán, lo importante es no limitarse a mirar el obstáculo, sino enfocarse en cómo superarlo: él jamás va a enviar pruebas mayores a las que podamos superar. Para eso Él está siempre con nosotros, de manera que al sentirlo tú en tu corazón, recuerdes que no estás solo, que nunca lo estuviste y que nunca lo estarás.
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